lunes, 19 de septiembre de 2016

El colapso de las adopciones. (Adopción en Comunidad Valenciana).

La Comunitat registra el mayor retraso de España para acoger a un niño. Casi 3.000 familias esperan hasta 10 años para lograr su sueño

Claro que hay inquietud por el caso de Joan. ¿Me puede pasar a mí? Esa es la pregunta que se hacen algunas familias que nos llaman. Lo normal es que la preadopción siga adelante y no pase nada. Pero dramas como este te meten el miedo en el cuerpo». Ruth Martínez, fundadora de la asociación Adoptants, que engloba a más de un centenar de hogares de la Comunitat en fase de acogida o con un niño ya adoptado, reconoce que la trágica ida y vuelta consumada esta semana del pequeño de cuatro años desde su casa de preadopción en Sueca, su hogar durante tres años, hasta los brazos de su madre biológica ha sembrado la inquietud entre las familias que hoy en día dan techo a un niño, que anhelan culminar la adopción pero que aún no tienen el proceso culminado.

«En absoluto, no debe haber ninguna inquietud. Todas las administraciones tenemos fallos, pero este caso es absolutamente insólito. Es insólito que se tarde tanto tiempo y tremendamente injusto que un niño pase tantos años en esta situación de indefinición». Es la respuesta ante los nervios de las familias por parte de la directora general de la Infancia y la Adolescencia de la Generalitat, Rosa Molero. «Las familias pueden estar tranquilas», añade.

Pero lo cierto es que el drama vivido por Joan, por sus padres de preadopción y por su madre biológica se ha añadido como una montaña más que superar, aunque sea psicológica, en la cordillera de dificultades que afrontan todos aquellos que optan por convertirse en padres mediante una adopción. «Esta semana, cientos de personas han llamado a la Consejería de Servicios Sociales, aterrados porque les puedan quitar a sus niños. No es lo normal, pero siempre que existe acogimiento preadoptivo, puede pasar lo que ha ocurrido con Joan», subraya Enrique Vila, abogado de la pareja de acogimiento del pequeño de Sueca. «Es necesario cambiar la ley para que un niño no pase a manos de la familia preadoptiva hasta que el proceso judicial sea firme y no haya marcha atrás», añade el letrado.

En la Comunitat Valenciana hay 145 familias de acogimiento preadoptivo (ahora llamadas de 'guarda con fines de adopción'): 96 en Valencia, 33 en Alicante y 16 en Castellón, según datos de la Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas. Pero el espectro existente de aspirantes a convertirse en padre o madre de adopción se dispara al contemplar el atasco que existe en el sistema. «La adopción nacional está colapsada, sobre todo en la Comunitat Valenciana, que es donde más atasco existe», asegura Ruth Martínez. La directora general de Infancia y Adolescencia reconoce que hay «mucho por hacer». Acepta la falta de personal, psicólogos y equipos encargados de evaluar a las familias.

Rosa Molero habla de unos ocho años para culminar una adopción. Las estadísticas son más reveladoras. Basta echar un vistazo a la lista de la conselleria con las familias valencianas pendientes de recibir el certificado de idoneidad, el papel necesario para convertirse en candidatos a la posterior asignación de un niño. Un total de 2.527 familias a las que ni siquiera se ha realizado aún el examen psicosocial. Y muchas de ellas, a la espera desde 2006. Una década de impaciencia. A ello hay que sumarle otras 170 personas ya con este certificado pero sin menor asignado. Y el atasco aumenta día a día. Cada año, la Comunitat registra 250 solicitudes de adopción nacional. Y por auto se conceden 80. Apenas una de cada tres expectativas queda cumplida.

Nuestra petición es que se suspenda la recepción de nuevas solicitudes de adopción hasta que se resuelva el atasco existente. Es inhumano tener a las personas así, a la espera de un certificado o una llamada por el sueño de ser padres. El que ha presentado los papeles este año o hace poco, no es consciente de que quizás no logre adoptar nunca». La directora general pone sobre la mesa otro mal que se ha extendido y que pervierte el sentido en este caso de los acogimientos, la figura escogida para que menores cuya tutela está temporalmente en manos del Consell pasen un tiempo en un buen ambiente a la espera de constatar si pueden regresar con sus padres o familias. «El 80% de los acogimientos se han transformado en permanentes, y esto es algo que tenemos que arreglar», subraya Molero, en aras a lograr que efectivamente el acogimiento se convierta en algo transitorio hasta el regreso del menor a su entorno o su posible adopción.

La falta de personal que la conselleria reconoce es calificado desde la asociación Adoptants como «brutal». Más necesidad de psicólogos, «falta de personal en los centros de menores, falta de personal para controlar cuánto tiempo pasan los niños en las familias de acogida»... O escasez de personal «en el departamento de orígenes de la conselleria, el encargado de gestionar el derecho de todo niño a saber de dónde viene o cuál es su origen, que hace que la respuesta se demore hasta un año».

En cualquier caso, la posibilidad de que se repita un caso como el de Sueca es mínima. La directora general insiste mucho en ello. «Es insólito», repite en muchos fragmentos de la conversación. Sus dudas acerca de si en el caso de Joan se ha seguido el mejor camino son palpables. «Debe siempre mandar el interés superior del menor. Ni un juez, ni un equipo psicosocial ni la administración pueden hacer lo que quieran, sino seguir siempre la práctica más satisfactoria con el niño. Incluso la ley marca que debe ser siempre escuchado y tenido en cuenta, si puede hacerlo, sea cual sea su edad», subraya Rosa Molero.

«Es insólito», repite la responsable autonómica. Recuerda que un niño no entra en el sistema de adopción hasta que previamente no se ha estudiado «convenientemente su entorno y descartado que en su familia extensa no exista alguien que pueda hacerse cargo de él». Si no, se corre el peligro de incurrir en lo que Molero destacaba hace unos días en LAS PROVINCIAS: «Es una enorme barbaridad no haber facilitado un periodo de adaptación. En la memoria traumática del niño esto va a recordarlo como si fuera un abandono, es algo que lo va a marcar de adulto».

(Fuente: www.lasprovincias.es)


domingo, 18 de septiembre de 2016

Extranjeros no podrán adoptar niños peruanos hasta nuevo aviso, anunció Ministerio de la Mujer.

El Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables declaró en crisis el Sistema Nacional de Adopciones y ha suspendido toda adopción internacional de niños peruanos.

[Ministerio de la Mujer lamentó fallo de Corte Suprema sobre trata de menores en Madre de Dios]

Fue hace unos días que llegó a los medios la historia de tres niños peruanos, adoptados por misioneros cristianos provenientes de Estados Unidos, que sufrieron agresiones físicas y psicológicas por parte de estos.

La adopción ocurrió a través de Villa Hope, una agencia privada de adopciones acreditada ante el Estado peruano pero que, como reveló un informe de Latina, ha desaparecido del país. 

[MIMPV busca atender al 100 % de denuncias de mujeres violentadas]

El viceministro de Poblaciones Vulnerables, Mario Ríos, anunció que la suspensión seguirá hasta realizar una adecuada evaluación de las agencias de adopciones. 

Los datos revelados por Latina parecen señalar que la tarea no será fácil: en los últimos cinco años, de los 1702 niños han sido dados en adopción, 582 fueron al extranjero y gran parte de ellos se encuentra en Italia (302), donde cuatro de las ocho agencias no dan razón sobre ellos.

ADOPCIONES NACIONALES SIGUEN EN PIE


Solo las adopciones internacional han sido suspendidas. Si eres peruanos y deseas adoptar un niño, aún lo puedes hacer (siempre y cuando haya sido declarado en abandono por el Poder Judicial).

[Ministerio de la Mujer abre investigación tutelar a favor de menores que iban a ser vendidos por sus padres en el Callao]

En esta adopción pueden participar personas solteras, casadas o en uniones de hecho desde los 25 años de edad hasta los 55. Además, se debe cumplir con una capacitación y evaluación integral antes de obtener la custodia.

DATO

  • El viceministro Mario Ríos anunció también una completa auditoría a las adopciones realizadas en los últimos cinco años.
(Fuente: www.peru21.pe)

Organismos extranjeros no completaron informes sobre situación de niños peruanos adoptados.

El caso de la familia Nachtigal, una pareja de estadounidenses que adoptó y maltrató a tres niños peruanos, fue la alerta para que el Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (MIMP) descubriera un evidente descuido en la etapa postadoptiva de los menores e iniciara la reorganización total de la Dirección General de Adopciones (DGA).
En los últimos seis años, 565 familias adoptaron a menores peruanos. De estas, 304 eran extranjeras, frente a 261 peruanas. Sin embargo, en 62 casos las autoridades y organismos extranjeros acreditados para estas adopciones no han cumplido con entregar los informes de la situación de los menores adoptados.

Mario Ríos Espinoza, viceministro de Poblaciones Vulnerables del MIMP, refirió que en el caso de los extranjeros se debe enviar ocho informes postadoptivos al Perú. Sin embargo, además de que muchos no cumplieron con este proceso, presentaron informes superficiales que no profundizaron en el seguimiento y situación real de los niños, niñas y adolescentes, o tercerizaron las visitas a las familias adoptivas.

“Los informes postadoptivos no se ciñen a los lineamientos establecidos por las directivas, referidos a la apariencia y comportamiento, estado de salud, lenguaje, desarrollo cognitivo y estado emocional, así como a la adaptación y dinámica familiar, pautas de crianza, sociabilidad, economía, condiciones de vivienda y adopción, y abordaje de los orígenes”, refirió.

Ríos comentó que, tras una investigación a la DGA, se encontraron una serie de irregularidades. Por ejemplo, había registros manuales que imposibilitaban generar información y seguimiento de los casos, se detectó descuido en las Unidades de Adopción Regional, pues no había una adecuada supervisión a su trabajo, pese a que en algunos casos estas dependencias se encargaban de realizar la función de investigación tutelar. 

LAS MEDIDAS

Tras las falencias encontradas, sobre todo en la etapa postadoptiva, se declaró en reorganización la DGA y se nombró a una comisión para evaluar y proponer las recomendaciones necesarias para la reforma administrativa y de gestión interna, la cual tiene 30 días de plazo para presentar su informe.

El viceministro sostuvo que, como parte del proceso de reorganización, se está evaluando modificar la norma para que, en caso de encontrarse algún incumplimiento por parte de los organismos que apoyan las adopciones internacionales, se cancele su acreditación o se impongan sanciones.

En tanto, se ha suscrito un convenio de cooperación interinstitucional entre el Ministerio de Relaciones Exteriores y el MIMP, para el seguimiento postadoptivo internacional, y se está coordinando con las embajadas de los países y los consulados del Perú en el extranjero para que cuando tengan informes de seguimiento postadoptivo pendientes de entrega los remitan de manera correcta y oportuna.

También se trabaja para ampliar el compromiso postadoptivo que suscriben las familias nacionales e internacionales para que los padres mantengan en comunicación a los niños adoptados con la DGA.

Asimismo, se impulsa la creación de la ‘tarjeta de alerta’, para el reporte inmediato de hechos que adviertan alguna posible irregularidad, y la creación de la ficha de atención telefónica y vía Skipe, para registrar cada tres meses las comunicaciones realizadas con las familias y niños en adopción y postadopción.

A mediano plazo se incluirá a un representante del Poder Judicial como integrante del Consejo Nacional de Adopciones y se trabajará en la separación del área adoptiva y postadoptiva, que actualmente se encuentran unidas.

Asimismo, se designará un equipo de profesionales para el acompañamiento postadoptivo especializado y así evitar las adopciones truncas o frustradas.

PROCESO DE ADOPCIÓN

En tanto, las adopciones para familias nacionales continúan. La DGA recibe del Poder Judicial y de la Dirección de Investigación Tutelar un promedio de 10 a 12 expedientes mensuales de niños, niñas y adolescentes declarados judicialmente en estado de abandono en todo el país.

Los menores son promovidos a la adopción solo cuando cuentan con declaración de abandono y sentencia consentida.

Hay dos tipos de adopciones: la regular, que se refiere a niños y niñas menores de 9 años de edad, y las prioritarias, que agrupan a niños mayores de 9 años, adolescentes, grupos de hermanos o personas con problemas de salud y discapacidad.

Actualmente 29 menores están en la primera categoría y 369 en la segunda. En tanto, hay 194 familias nacionales y 93 familias extranjeras en lista de espera para una adopción.

Según la estadística de la DGA, en los últimos cinco años años, 429 menores en situación regular fueron dados en adopción a familias peruanas y 334 a familias extranjeras. Entre los países con mayor número de adopciones están Italia (179 niños), España (63 niños) y Estados Unidos (22 niños).

En el caso de los niños prioritarios, 70 fueron dados en adopción en Perú y 258 en el extranjero. Entre los países con más niños prioritarios peruanos adoptados están Italia (147 niños) y Estados Unidos (84 niños).

(Fuente: www.peru21.pe)