viernes, 28 de marzo de 2014

Por qué adoptar es cada vez más difícil.

Adolfo García Garaikoetxea mezcla en la conversación su feliz experiencia como padre adoptivo y sus conocimientos como secretario de la Asociación de Familias Adoptivas de Navarra (Afadena) y como coordinador de CORA, la Coordinadora de Asociaciones en Defensa de la Adopción y el Acogimiento, que reúne a una treintena de organizaciones de padres adoptivos y la única asociación de hijos adoptados que existe en nuestro país. 

Adolfo y su mujer tienen dos hijas: Valeria, de Rusia, y Yun, de China. Junto con Etiopía, estos son los países en los que más han adoptado tradicionalmente los españoles, sobre todo por la rapidez de la tramitación, el factor que más valoran quienes deciden ser padres por esta vía. Valeria tenía tres años cuando llegó a España, en 2003; Yun tenía dos, y llegó en 2007. En el primer caso el proceso duró dos años. En el segundo, dos y medio.
Estos plazos ya eran mayores que en épocas anteriores, y han seguido creciendo. "Hoy prácticamente no podemos asegurar una espera menor de cuatro años", resume García Garaikoetxea. Tiempos que se acercan a los entre cinco y siete años que suelen tardar las adopciones nacionales.
"Es humano y totalmente comprensible el sentimiento de ansiedad del que espera", asume García Garaikoetxea, quien sin embargo recuerda que "la adopción no es una herramienta para solucionar un problema de fertilidad o una voluntad de paternidad, sino que es una medida de protección de la infancia abandonada, de su derecho a tener una familia, y la obligación de las administraciones es proveer esa familia al menor", como establece la Convención de Naciones Unidas sobre los Derechos del Niño, de 1989.
Más del 90% de las familias españolas que lo solicitan obtienen el necesario certificado de idoneidad: según las últimas cifras del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, en 2012 eran cerca de 33.000. Una cifra "realmente excesiva", según el coordinador de CORA, sobre todo si tenemos en cuenta que tras el boom de 2004, cuando llegaron a España unos 5.000 niños,el número de adopciones no ha hecho más que descender. En 2008 vinieron 3.156; en 2011 fueron 2.573, y en 2012, 1.669. A los que hay que sumar los en torno a 200 menores que cada año son adoptados dentro del territorio.

La adopción nacional: un proceso lento y complicado

A pesar de que en 2008 los plazos de la adopción nacional eran aún mucho más largos que los de la internacional, sobre todo porque en nuestro país hay pocos niños abandonados (la mayoría de los que están en los orfanatos tienen familia y sólo pueden ser dados en acogimiento), David Robledo y su mujer se decidieron por esta opción porque la segunda se les escapaba de presupuesto y les parecía "un esfuerzo mucho mayor".
Querían un bebé menor de un año, que son la mayor parte de los adoptables en España. Debían cumplir dos requisitos: pasar lo que David define como un "estudio muy detallado" del que sería el entorno material y familiar del niño, y que la media de edad de la pareja no sobrepasara en 41 años la edad del pequeño.
Paralelamente a estos trámites decidieron pedir un acogimiento permanente, que "va mucho más rápido", y en 2011 recibieron en casa a dos hermanas, de 5 y 3 años. Según la legislación española, el acogimiento paraliza la tramitación de la adopción durante un año, algo que resulta incomprensible para David, que no entiende que le perjudique estar realizando "una labor social".
Finalmente, en marzo de 2013 les dijeron que antes de final de año tendrían a su hijo. Pero el pasado 5 de enero la mujer de David cumplió 43 años. Con los 39 de David, la pareja superaba la diferencia de edad máxima exigida. Fueron ellos los que avisaron a la Comunidad. Resultado: automáticamente fueron borrados de la lista.
"No supimos ni sabremos nunca por qué no llegamos a tener un niño, cuando estuvieron dando bebés anteriormente a gente que había acudido con nosotros a la reunión preparatoria", reflexiona David. "Hemos sufrido mucho. Todavía tenemos una cuna para vender", concluye, visiblemente afectado.

La adopción internacional: una espera cada vez más larga

Si los plazos de la adopción nacional se han mantenido más o menos estables, los de la internacional no han dejado de alargarse. En parte por la ratificación del Convenio de La Haya, que protege mejor el interés y el cuidado del menor, pero que al endurecer los requisitos hace que disminuya el número de adopciones.
A esto hay que añadir las dificultades propias de cada Estado. Bien por razones políticas –como en China y en Rusia, donde "la imagen que quieren dar de potencias mundiales" hace que consideren "una vergüenza nacional mostrar que no son capaces de hacerse cargo de sus niños abandonados", analiza García Garaikoetxea–; o bien por razones religiosas, como en Malí o en Marruecos, donde ahora es indispensable que los adoptantes sean musulmanes.
El nuevo marco legal de China ha supuesto que las adopciones pasaran de tardar seis meses a más de siete años. Y en la Federación Rusa (que nunca ha ratificado el convenio), los recientes cambios legislativos están impidiendo que se termine de cerrar un acuerdo bilateral. Las tramitaciones allí están paradas.
Por eso, cuando en 2008 Conchi Sánchez y su marido quisieron adoptar un hermano para su hijo biológico, optaron por Vietnam. Con la ayuda de InterAdop, una entidad colaboradora en la adopción internacional (ECAI) consiguieron que su expediente entrara en el país justo antes de que éste ratificara el Convenio. La alegría inicial duró poco: "El Gobierno decidió unificar las tramitaciones nuevas y antiguas y crear nuevas listas", lo cual paralizó su expediente. Además, a las ECAI debieron regularizarse otra vez. InterAdop lo consiguió en 2011.
"Habían pasado tres años y estábamos igual", lamenta Conchi. Sus papeles estaban a punto de caducar, así que la Comunidad les propuso intentarlo en otra parte. La excelente experiencia de un conocido los animó a probar en Colombia en 2012. Las pruebas de idoneidad son diferentes para cada país, así que tuvieron que empezar de nuevo.
A finales de 2013 ya estaban en el número 241 de la lista para adoptar niños de entre 5 y 6 años. Sin embargo, en enero los sorprendieron con la noticia de que habían vuelto a bajar en la lista. La razón: la decisión de muchas familias de cambiar el tramo de edad ante las demoras provocadas, al parecer, por un endurecimiento de los requisitos. Les dijeron que tendrían que esperar otros cinco años. "Para mí fue tremendo emocionalmente. Sentí una impotencia terrible. No sabía a quién acudir, no podía hacer nada", expresa Conchi con tristeza.

Adopción monoparental: más difícil todavía

A estos factores que han complicado la adopción internacional, Adolfo García Garaikoetxea añade uno que ha resultado determinante: el rechazo de muchos países (entre ellos Rusia) a que los homosexuales puedan adoptar –una opción legal España desde la aprobación del matrimonio gay en 2005–, que los ha llevado a no permitir la adopción por parte de personas sin pareja. Es el caso de Eva, que prefiere dar un nombre falso y modificar algunos detalles de su historia para poder contar cómo ha vivido la experiencia.
Hace cuatro años decidió que quería tener un hijo sola, y en julio de 2010, tres meses después de la primera reunión informativa, le mandaron su expediente y "comenzó la aventura". Ese año, las listas en España estaban cerradas, y había pocas opciones para una familia monoparental: en Bulgaria las ECAI estaban saturadas y daban prioridad a las parejas, en India estaban centrados en la adopción desde Estados Unidos… Así que "ya casi llorando, porque lo veía imposible", Eva llamó a una ECAI que trabajaba en Honduras. Allí admitían mujeres, había una lista única para parejas y personas solas, y podía elegir un niño menor de 5 años.
Pasaron ocho meses desde que realizó la solicitud hasta que la Comunidad de Madrid comenzó el estudio. Califica la primera entrevista como un infierno. La trabajadora social cuestionó su sexualidad y le preguntó "mil veces" por qué quería ser madre y todos los detalles de su vida cotidiana, de sus relaciones amorosas y de su familia.
Ella nunca había querido ser madre biológica, ya que "con tantos niños sin padres" le parecía mejor adoptar, así que tuvo que mentir y apelar a un problema de salud para justificar por qué no había intentado la inseminación artificial antes de plantearse la adopción. "Para ellos, lo primero que tienes que hacer es intentar quedarte embarazada de una pareja; después, inseminarte, y sólo en último término adoptar. Te dicen que si quieres ayudar te vayas a una ONG. Salí de la entrevista llorando", rememora.
Tras otra entrevista y una visita domiciliaria, por fin en mayo de 2012 pudo firmar el contrato con la ECAI para iniciar el proceso de adopción. Desde Honduras le pidieron nuevos análisis, fotos de la casa y más papeles, hasta que un año después le dieron el visto bueno a su expediente. Ya ha terminado el curso de formación, y calcula que aún le falta alrededor de año y medio para ser madre.

Ponerse en el lugar del niño

Al igual que las leyes de adopción han ido cambiando, también lo ha hecho la perspectiva de las asociaciones, explica García Garaikoetxea: "Comprender que no por iniciar los trámites adquirimos el derecho de adoptar –porque ese derecho no existe– nos ha hecho dejar de trabajar para acortar los plazos y aceptar que la Administración debe tomarse su tiempo para un acto de tanta responsabilidad como es declararte idóneo".
Para el coordinador de CORA resulta esencial que tanto administraciones como familias aprendan a prorizar el interés de los niños. La mayoría de las familias quiere un bebé sano, "cuando el perfil de niños adoptables, tanto en España como en el extranjero, es un perfil de necesidades especiales: con patologías, mayores o grupos de hermanos". Según él, la mecánica debería ser distinta, similar a la que ya opera en Navarra para adopciones nacionales: en el momento del abandono se busca a la familia que mejor puede atender a ese menor determinado, independientemente de la fecha en la que ésta se haya ofrecido.
"Esto exige que padres y madres asuman la posibilidad de una espera más larga en beneficio del niño", sostiene García Garaikoetxea, que por otro lado pide a las administraciones que no dilaten los procesos artificialmente de forma que, cuando se inicia una tramitación que va a durar cinco o seis años, en realidad "se está adoptando a menores que aún no han sido abandonados", mientras los que ya han sufrido este problema siguen en los orfanatos y tienen cada vez menos probabilidades de ser elegidos por alguna familia.
David dice que ahora podrían pagar una adopción internacional, pero que están agotados y no se plantean seguir intentándolo. Además, ya son una familia con sus dos hijas en acogida. Conchi cree que su marido está harto de la burocracia y que, cuando en 2015 caduque su idoneidad, no estará dispuesto a empezar de nuevo. Si todo va bien, antes de dos años Eva tendrá a su hijo con ella. En total, calcula que se habrá gastado alrededor de 25.000 euros, y habrá pasado un lustro desde que comenzó todo. Al menos ella lo habrá conseguido.
(Fuente: Eldiario.es)

Adopción internacional: Trámites y requisitos a seguir para adoptar un niño.

Adopción internacional en España

La adopción ya no responde únicamente al deseo de tener un hijo cuando no se puede tener de manera natural, hoy en día se ha convertido, además, en una opción más para ampliar la familia. La convivencia en sociedad de diferentes modelos de familia ha acrecentado la adopción. Actualmente es muy común la necesidad de experimentar la maternidad o paternidad en solitario o el deseo de tener un hijo de las familias del mismo sexo.
En España son más frecuentes las solicitudes de adopción internacional que las nacionales, aun siendo el proceso de la primera más complicado que el de la segunda. Se exigen trámites añadidos en el país de origen que es fundamental seguir, por su orden, al pie de la letra. En principio, cualquier familia convencional cumple con las exigencias de las autoridades respecto a la adopción. Sólo hay que obedecer a los parámetros legales y, en este sentido, nuestra legislación permite adoptar en casos concretos.
- Los adoptantes, bien sean, un matrimonio, una pareja de hecho u hombres y mujeres solteros han de tener más de 25 años (en las parejas es suficiente si uno de los dos los tiene).
- Que los adoptantes tengan 14 años más que el niño que se quiere adoptar.
- Fundamental, que se haya obtenido el Certificado de Idoneidad.
- En el caso que nos ocupa de adopción internacional, además hay que cumplir con las exigencias del país de origen. A tener en cuenta: hombres solteros y familias homoparentales son los que tienen más dificultad al no ser considerados idóneos para la adopción en muchos países.
Una vez conocidas estas consideraciones previas relativas a los requisitos exigidos por las autoridades españolas, deben iniciarse los trámites de adopción internacional requeridos por el país de origen.

Primera etapa: el papeleo

- Presentar una solicitud de adopción internacional en la Delegación Provincial de la Consejería de Asuntos Sociales donde conceden también el Certificado de Idoneidad.
- Concedida la idoneidad hay que comunicar qué país de origen se ha escogido para la adopción, en la Consejería de Bienestar Social de la Comunidad Autónoma de residencia. Es preferible elegir uno que forme parte del Convenio de La Haya para evitar el tráfico de niños. Dicho convenio asegura que familia adoptiva y niño adoptado son idóneos.
- Cerciorarse que como familia adoptiva se reúnen los requisitos de adopción internacional exigidos por el país de origen del niño, información que facilita cada Comunidad Autónoma.
- Es aconsejable contar, además, con la ayuda de una Entidad Colaboradora de Adopción Internacional (ECAI) para agilizar los trámites en el país de origen. Como ayuda para escoger la ECAI más adecuada,adopción.org facilita una información muy completa.
- Una vez presentada la solicitud de adopción internacional, las autoridades del país de origen consideran qué niño puede ser adoptado. Elaboran un informe detallando su idoneidad para la adopción, así como sus datos personales, familiares y sanitarios que entregan a las autoridades españolas.
- Ambos países se intercambian documentación de familia adoptiva y niño y si todo está en regla se continúa con el proceso. La primera etapa está superada.

Segunda etapa y última: el viaje

- En el momento en el que la familia adoptiva está de acuerdo con el niño que les ha sido asignado, los padres tienen que viajar al país de origen donde se formaliza la adopción y termina el proceso.
- Desgraciadamente, no siempre sale todo bien. En ocasiones hay problemas con el niño asignado o con procesos judiciales de adopción eternos que hay que superar. Una última etapa que a veces resulta dolorosa emocionalmente.

Recomendaciones

Para contar con toda la información pormenorizada es muy recomendable visitar la página web del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad.
Y si se quiere conocer de primera mano las experiencias por las que ya han pasado otras familias adoptivas en Adoptiva-dos se pueden consultar dudas y compartir vivencias relativas a la adopción internacional.
(Fuente: Zoomnews.es)

miércoles, 26 de marzo de 2014

Deducciones en Madrid para la declaración de la renta 2013.

Las deducciones en la comunidad de Madrid son las siguientes, según un exhaustivo informe elaborado por el Registro de Economistas Asesores Fiscales (Reaf-Regaf) :
1.- Deducción por nacimiento o adopción de hijos:
- Primer menor: 600 €.
- Segundo menor: 750 €.
- Tercer menor o sucesivos: 900 €.
- En el caso de partos o adopciones múltiples, las cuantías se incrementarán en 600 € por cada hijo.
- La suma de la base imponible general y la del ahorro, no puede ser superior a 25.620 € en tributación individual o a 36.200 € en tributación conjunta.
2.- Deducción de 600 €/hijo por adopción internacional.Esta deducción es compatible con la deducción por nacimiento o adopción de hijos.
3.- Deducción por acogimiento familiar de menores en régimen de acogimiento familiar simple, permanente o preadoptivo, administrativo o judicial, siempre que convivan con el menor durante más de 183 días del período impositivo:
- Primer menor: 600 €.
- Segundo menor: 750 €.
- Tercer menor o sucesivos: 900 €.
- No dará derecho a esta deducción el supuesto de acogimiento familiar preadoptivo cuando se produjera la adopción del menor durante el período impositivo.
- La suma de la base imponible general y la del ahorro, no puede ser superior a 25.620 € en tributación individual o a 36.200 € en tributación conjunta.

(Fuente: www.finanzas.com) El resto del artículo, no es publicado, puesto que no tiene ningún tipo de interés en materia de Adopciones...

martes, 25 de marzo de 2014

Brasil facilita la adopción de niños por parte de parejas extranjeras

El Consejo Nacional de Justicia (CNJ) de Brasil aprobó hoy una norma que facilita a las parejas extranjeras la adopción de niños en el país, informaron fuentes oficiales.
Hasta ahora los extranjeros sólo podían optar a la adopción de un brasileño tras un engorroso proceso burocrático y se les limitaba las posibilidades a aquellos niños que no habían podido ser ubicados en una familia de origen nacional.
Según la decisión adoptada hoy por el CNJ, los brasileños y los extranjeros podrán inscribirse en el Registro Nacional de Adopción en las mismas condiciones, lo cual entrará en vigor en los próximos días, cuando la norma sea publicada en el Diario Oficial del Poder Judicial.
Actualmente, de acuerdo a datos oficiales, en Brasil hay 5.440 niños y adolescentes (hasta 17 años) a la espera de adopción y el registro de familias interesadas tiene 30.424 inscritos.
De ellos, sólo ocho tienen menos de un año de edad, 59 tienen dos años y 91 apenas tres. En el otro extremo de la lista, figuran 567 chicos de 17 años y otros 628 que hoy tienen 16.
Según los mismos datos, las familias postulantes a adoptarlos optan, en su enorme mayoría, por niños de hasta seis años de edad, mientras que sólo 43 aceptarían a un adolescente de 17 años.
(Fuente: www.noticias.lainformacion.com)

viernes, 21 de marzo de 2014

Información sobre Certificado de no reubicación de menores y Convenio Bilateral 1990. Adopción en Rusia.

El viernes, día 14 de marzo, todas las ECAI acreditadas para tramitar expedientes de Adopción Internacional en Federación de Rusia, mantuvieron una reunión en la que se acordó solicitar a todos Directores Generales de las diferentes Comunidades Autónomas que, en virtud de lo requerido por los Juzgados y Delegaciones Regionales del Ministerio de Educación de Federación de Rusia, procedieran a unificar el contenido del Certificado de no reubicación de menores y Convenio Bilateral 1990.

El precitado Certificado debe emitirse a favor de todas las familias con asignación de un menor con independencia de la Comunidad Autónoma en la que residan, con el objeto de no incurrir en discriminación ni tratamiento no igualitario.

El acuerdo adoptado, así como los documentos correspondientes al contenido del Certificado y su fundamentación jurídica, han sido comunicados a los Directores Generales de las Comunidades Autónomas, así como al Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, con el objeto de que tenga constancia de lo solicitado. 

En la confianza de una respuesta acorde con lo solicitado, seguiremos informando de todo cuanto acontezca al respecto.

(Fuente: www.ecai-asefa.com)

martes, 18 de marzo de 2014

Las adopciones se quedan huérfanas. Adopción en Canarias.

Tiempos de espera más largos, requisitos más duros, controles más exigentes y, sobre todo, el cada vez elevado coste económico de la tramitación y la pérdida de poder adquisitivo de las familias ha provocado que las cifras de adopciones de menores nacionales y extranjeroscaigan hasta niveles de hace casi veinte años. En Canarias, la reducción supera el 40% solo en los últimos dos años (en 2012 hubo 107 y 158 en 2011), un porcentaje que incluso es mayor si contabilizamos los registros del último lustro y que supone la cifra más baja del último decenio. El motivo, según reconocen desde la Dirección General del Menor del Gobierno de Canarias, tiene una “relación directa” con el contexto actual de crisis económica, sobre todo en las adopciones de niños extranjeros, por el alto coste que supone la tramitación de este tipo de expedientes.
En concreto, según datos aportados a este periódico por la citada Dirección General del Menor, un total de 90 menores fueron adoptados por familias canarias en 2013, la mayor parte de ellos (64) fueron foráneos, por solo 26 españoles. Al igual que viene sucediendo en la última década, China fue el país de procedencia de la mayor parte de los niños extranjeros adoptados el año pasado en el Archipiélago, con un total de 29. Por detrás, le siguen Etiopía (19), Rusia (7), Lituania (2) y Colombia, Filipinas, India, Mali, México, Nicaragua y Vietnam, todos estos con un menor. En cuanto a las solicitudes, como viene ocurriendo desde que se iniciara la recesión económica en el año 2008, se ha producido una progresiva disminución en el número de peticiones, tanto de adopciones nacionales como internacionales. Así, el año pasado se registraron 69 solicitudes de adopción nacional y 44 para menores foráneos, aunque se notificaron 127 y 174 idoneidades, respectivamente.
Desde la Consejería de Políticas Sociales subrayaron que, a pesar de la crisis, entre 2008 y 2012 un total de 814 menores comenzaron a vivir con sus nuevas familias adoptivas (213 nacionales y 589 extranjeros). Las mismas fuentes destacaron también que en los últimos años se han incrementado las adopciones nacionales de menores con especiales dificultades, como mayores de ocho años, grupos de tres o más hermanos o aquellos que presentaban discapacidad física, psíquica o sensorial o padecen enfermedades graves. En este sentido, del total de 26 niños nacionales adoptados en el año 2013, un total de 19 tenían este tipo de características especiales, lo que según la Dirección General del Menor “muestra que cada vez es mayor el número de familias que, tras un periodo de reflexión y maduración y tras haber determinado cuáles son las características especiales que pueden afrontar, deciden adoptar un menor con esta singularidad”.
China sigue a la cabeza
Las 64 adopciones internacionales registradas el pasado ejercicio en las Islas suponen la cifra más baja desde 2000, año en que vinieron 80 niños a las Islas y lejos del pico más alto, que fue en 2006 con 202 menores. Como ya se apuntó, China siempre ha ocupado un papel preeminente. En términos generales, entre los años 1997 y 2013 se culminaron en el Archipiélago cerca de 900 procesos de adopción de menores chinos. En ese mismo periodo, por detrás del gigante asiático, se encuentran, a gran distancia, Rusia, con 199 niños; Etiopía, con 101; Colombia, con 90; Rumanía, con 73; y Nepal, con un total de 50.
En la orilla opuesta, los países de origen con menor número de procesos, todos en este caso con una sola adopción entre el referido espacio temporal entre 1997 y 2013, son Albania, Burkina Faso, Ecuador, Hungría, Isla Mauricio, Paraguay y Polonia. Además, de procedencia no especificada se detallaron cuatro casos. Según precisaron desde el departamento autonómico, la volatilidad de las cifras de adopciones internacionales está condicionada, irremediablemente, por los convenios de colaboración que se establecen en esta materia con los distintos países de origen de los menores, ya que por ejemplo la situación política que se vive en ellos determina la continuidad o la paralización de los acuerdos, como es el caso de Mali, donde varias familias canarias esperan desde hace más de dos años que el conflicto interno en esa nación africana se resuelva para acceder a una adopción.
Según las mismas fuentes de la Consejería regional de Políticas Sociales, “la tendencia de adopciones en 2014 será parecida a la del año pasado, en tanto continúe la misma coyuntura socioeconómica”. “Más del 60% de las parejas que inician los trámites de adopción lo hacen en la doble vía: la nacional y la internacional, y se ha constatado que las familias están dejando la segunda por las cuestiones económicas inherentes a este tipo de proceso y optan por la primera”, arguyeron. Desde el departamento autonómico remarcaron que por los condicionantes que la legislación española aplica para la adopción plena, el tiempo de espera medio de las familias para tener un hijo se eleva a siete años, si bien matizaron que ya la adopción internacional ronda, en algunos casos, ese mismo periodo. Pese al actual contexto, el director general de Dependencia, Infancia y Familia anima a las parejas a iniciar el trámite de la adopción para “dar así una oportunidad a los menores que necesitan de una familia”.

Convenios en tres continentes

En el ámbito de la Comunidad Autónoma de Canarias hay dos listas de espera para la adopción nacional; una, en la que están inscritas aquellas familias que solicitan la adopción de uno o dos niños (de cero a siete años de edad) que no tengan ninguna necesidad especial; y otra, en la que se hallan familias que reclaman menores con características especiales (mayores de 8 años, los grupos de tres o más hermanos y aquellos que presenten discapacidad física, psíquica o sensorial, padezcan enfermedades graves, crónicas, degenerativas o contagiosas, o hayan manifestado especial inadaptación social).
Si se opta por la vía de la adopción internacional, el trámite puede llevarse a cabo ante la autoridad central y competente del país al que se ha recurrido; a través del propio Gobierno de Canarias, que remitirá la pertinente documentación al Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad; o realizar el proceso mediante una Entidad Colaboradora de Adopción Internacional (ECAI), que esté habilitada tanto en las Islas como en otra comunidad autónoma -si no existiera en Canarias- y en el país de origen del menor. En la actualidad, el Archipiélago acoge siete ECAI, que operan en nueve países de tres continentes (África, América y Asia): Lituania, Nigeria, Burundi, México, Colombia, Perú, China, Filipinas y Vietnam.
(Fuente: www.diariodeavisos.com)

Las adopciones nacionales superan por primera vez a las internacionales en Bizkaia.

BILBAO - Una de las trabajadoras del servicio de la sección de Acogimiento Familiar y Adopción de la Diputación recuerda que, cuando ella empezó a trabajar en el departamento, hace ahora 12 años, se tramitaba una treintena de solicitudes de adopción internacional al mes. Ahora se reciben algunas pocas más que esa cantidad en todo el año. "Han bajado en picado", reconoce. Tanto que actualmente las familias vizcainas que optan por la adopción nacional superan ya a las que recurren a países como China, Rusia o Colombia. Las solicitudes para adopciones internacionales están en caída libre: hoy en día únicamente se tramitan 37 al año, mientras que las nacionales siguen establecidas en medio centenar. La prolongación de los procesos y los obstáculos que están empezando a poner algunos países ha hecho que muchas familias desistan de iniciar un proceso que se prolonga ya más de siete años en países como China. Los números lo dicen todo: hoy en día solo se registran 38 solicitudes, cuando hace apenas cinco años se recibían 111. "Y si se echa la vista atrás, las cifras son aún mayores", explica esta trabajadora. 
La crisis económica de los últimos años solo ha terminado de dar la puntilla a una tendencia que empezó a notarse en 2008, cuando se pusieron en marcha los cursos de formación obligatorios para todas las familias que quieran adoptar. "Hacían ver una realidad que la gente no conocía. La adopción es una medida de protección no exenta de problemas, no es siempre tan idealizada como uno se imagina. Había gente que se autoexcluía porque no se veían capaces de atender las necesidades específicas que tienen estos chavales", explica.
Al mismo tiempo, los procesos en los países se empezaron a complicar sobremanera. Los países establecen requisitos más exigentes a las familias adoptivas. Expedientes que se resolvían en año y medio empezaron a prolongarse hasta los siete, como actualmente está ocurriendo con países como China. Además, los países empezaron a fomentar la adopción nacional entre sus propios ciudadanos. Las condiciones se han vuelto muy estricta: China, por ejemplo, ya no acepta familias monoparentales ni personas con problemas de obesidad y tienen que tener estudios universitarios; Colombia está revisando sus procedimientos de adopción. En muchas ocasiones, solo se aceptan solicitudes para niños con necesidades especiales.
Por su parte, las solicitudes para una adopción nacional se han mantenido estables, en el entorno de las cincuenta al año: 52 en 2013 frente a las 58 de 2009. La inseguridad del proceso judicial para hacer efectiva la adopción ha hecho que, tradicionalmente, muchas familias elijan en primera lugar la adopción internacional. Cuando se adopta en un niño en un país extranjero, el proceso termina cuando se constituye la adopción: así lo determina el auto de un juez. Los procesos nacionales son diferentes: las familias pasan primero por un acogimiento preadoptivo de forma paralela al proceso judicial. Son dos, tres, cuatro años de espera, durante los cuales el niño sigue manteniendo la filiación de sus padres biológicos -y, en algunas ocasiones, también regímenes de visita- y que no siempre terminan con un resultado positivo. "Los autos judiciales son recurribles, por lo que a veces esa situación se alarga mucho. Hoy en día las familias tiene menos miedo de pasar por todo ese proceso, pero era una de las razones por las que iban al extranjero a adoptar", explican desde la sección de Adopción.
Más familias dispuestas Aunque las solicitudes ronden el medio centenar, apenas se constituyen unas 17 o 18 adopciones nacionales al año en Bizkaia: 21 en 2009, 16 en 2013. ¿Por qué tan pocas, si más de medio millar de menores viven actualmente en centros residenciales, tutelados por la Diputación? Porque no todos ellos pueden ser adoptados. "Niños en los centros tenemos muchos; susceptibles de ser adoptados, no tantos", advierten en Infancia. Con algunos de ellos se está trabajando para que puedan volver a vivir con sus padres o acogido por una familia. Dejando a un lado los casos en los que la propia madre renuncia a su hijo, tienen que ser situaciones muy claras de problemáticas irrecuperables: una enfermedad mental o drogadicciones muy graves. Aunque la Diputación, que es la entidad pública de protección en el territorio vizcaino, es quien considera que un niño puede ser dado en adopción, es el juez quien tiene la última palabra para privar a su familia de la patria potestad. "Por eso los procesos nacionales son más inseguros y hay gente que no está dispuesta a ello", explican.
En Bizkaia, actualmente, hay más familias dispuestas a adoptar a un niño que menores que necesiten un nuevo entorno. Más de 200 familias, apuntan desde la Diputación. Por eso, no hay niños que tengan que esperar una familia adoptiva. Si, acaso, grupos de hermanos o menores con necesidades especiales, para los que no hay tantas familias dispuestas a abrir las puertas de sus casas. En las adopciones nacionales, las familias realizan un ofrecimiento a la Diputación para hacerse cargo de un niño; cuando la institución necesita un hogar para algún menor, recurre a ellas para ver si se pueden hacer cargo del menor. El ofrecimiento puede ser diferente: de un bebé, de un grupo de hermanos o de un niño con necesidades especiales.
(Fuente: www.deia.com)

Hasta cinco años para una adopción. Adopción en Almería.

Adoptar, según la Real Academia Española es recibir como hijo, con los requisitos y solemnidades que establecen las leyes, al que no lo es naturalmente. De hecho, las personas que adoptan tienen todas las obligaciones derivadas de la patria potestad, desapareciendo, excepto en casos excepcionales, los vínculos entre el menor adoptado y sus padres biológicos.
En la actualidad, el plazo para conseguir una adopción oscila entre los tres y cinco años, un tiempo que no ha cambiado mucho en la última década, al igual que el proceso de selección para poder ser aptos para adoptar.

En 2013
En Almería, el año pasado, un total de 22 niños fueron adoptados por diferentes familias, dos menos que en el año anterior, 2012. De ellos, doce corresponden a adopciones nacionales, de las cuales nueve son de otra provincia y tres, de Almería.
Respecto a los otros diez menores, referidos a adopciones internacionales, están muy repartidos en hasta siete países de todo el mundo. Dos de China, Rusia y Etiopía; y uno en Filipinas, Nicaragua, Polonia y Vietnam. Cabe destacar que las solicitudes presentadas han sido muy superiores. 29 en el caso de las adopciones nacionales y 19 por parte de las internacionales.
El proceso para adoptar no es sencillo, ya que se trata de un asunto muy delicado. El Servicio de Protección de Menores de la Delegación Territorial de Igualdad, Salud y Políticas Sociales es el encargado de tramitar las solicitudes y los expedientes de adopción, así como de realizar los informes psicosociales necesarios para tramitar el proceso de adopción, tanto en el caso de las nacionales como de las internacionales.

Procedimiento
Así, el procedimiento no ha variado mucho. El primer paso de la familia adoptiva es plantear la cuestión en el Servicio de Protección de Menores, a partir de ahí comienza el proceso. En primer lugar se realiza un curso de preparación y formación en la adopción, de obligado cumplimiento, que sirve de reflexión y maduración de la solicitud por parte de los solicitantes. En el curso, con una duración de cuatro semanas con cuatro sesiones de tres o cuatro horas, se intenta dar a conocer el significado de la adopción y las características de la misma.
Una vez realizado el curso se realizan diferentes entrevistas e informes psicológicos por parte de trabajadores sociales, además de una visita al domicilio familiar para realizar una valoración que, junto con el Servicio de Protección de Menores, expiden o no la declaración de idoneidad con la que se les permite adoptar a los solicitantes.
Con esta declaración los demandantes pasan automáticamente a un registro central a nivel autonómico, de toda Andalucía. El paso siguiente es una larga espera hasta conseguir una adopción. Pero no todo queda ahí, una vez en posesión del menor, los primeros seis meses la familia adoptiva lo tiene en acogimiento preadoptivo, hasta que un juez dicta un auto de adopción.

Motivaciones
Según María García Cara, la jefa del Servicio de Protección de Menores, “en los últimos años se está observando un aumento de las adopciones nacionales en detrimento de las internacionales”. Respecto al perfil de las familias adoptivas García Cara explica a LA VOZ que “hay de todo, familias biparentales, heterosexuales y homosexuales”, pero si aclara que “impera la familia tradicional”.
Por otro lado, las motivaciones principales para adoptar a un hijo “responden mayoritariamente a problemas de fertilidad y se desea tener hijos, en otros casos minoritarios resulta como una opción dentro de un proyecto de familia para completarla o simplemente para ayudar a niños desamparados”, explica a LA VOZ, Juan Sebastián Fernández, profesor de la Universidad de Almería.

También asegura Fernández que en España “ha descendido casi a la mitad el número de adopciones, especialmente nacionales en los últimos cinco años y que en Almería, al contrario, abundan más las internacionales”.

(Fuente: www.lavozdealmeria.es)

Una pareja denuncia trabas a la adopción por el trabajo del marido.

No todos los padres pueden dedicar a sus hijos unas horas al día aunque vivan bajo el mismo techo, algunas veces incluso los ven dormidos. En muchos casos, la atención a los pequeños recae mayoritariamente en un cónyuge. Así lo explican Ruth María Valiente y David Ruiz. Ella es técnico de Calidad y Medioambiente en una de las principales empresas de Cáceres. El es economista y ejerce como jefe del departamento de alertas de una conocida empresa aseguradora en Madrid. Vuelve a Cáceres cada viernes a las seis de la tarde y disfruta de su hogar todo el fin de semana. Pero no puede ser padre adoptivo, no de momento, porque su trabajo lo impide.
Así lo dicen las conclusiones de los informes de valoración, que consideran que la pareja no tiene vida familiar "estable". Aunque desde 2011 se han dictado tres sentencias a su favor, y ni siquiera cabe recurso, la Junta de Extremadura no ha modificado los informes limitándose a darles el certificado de idoneidad. Esa contradicción hace prácticamente imposible la adopción en Rusia... y ya llevan cinco años.
Ruth y David se decidieron por la adopción en 2009, tras varias fecundaciones in vitro sin resultados. Optaron por Rusia, el país entonces más rápido. En noviembre entregaron la documentación a la Junta de Extremadura, entidad responsable de estos procesos, y en febrero de 2010 realizaron los cursos pertinentes.
Se sometieron a los tres informes preceptivos: el de la asistente social del ayuntamiento, el de la psicóloga de la Junta (se hizo a través de Cruz Roja), y el de la asistente social (también de Cruz Roja). El primero determinó que eran idóneos, los otros dos también fueron favorables, "pero cuando la Junta nos remitió en 2010 las conclusiones finales de los informes, nos topamos con que no éramos idóneos transitoriamente, por un periodo de un año", relatan. Pidieron trámite de audiencia para conocer la razón. No les recibió el equipo de valoración, sino la psicóloga y la asistente, y les respondieron que el único inconveniente era el trabajo de David en Madrid. La situación se consideraba transitoria porque David había pedido traslado a Mérida.
"Nunca pensamos que dos empleos estables fueran un problema. Yo trabajo en Cáceres 35 horas semanales, tengo tiempo suficiente, incluso familia en la que apoyarme", explica Ruth. Además, la legislación no dice nada al respecto. "Hay muchos padres que no ven a diario a sus hijos y no por ello se pone en duda su responsabilidad. ¿No pueden tener familia los transportistas, las azafatas, los pilotos...?", se pregunta. Además, "Madrid ya está a un paso, y a diario mi marido tampoco tendría mucho más tiempo, lamentablemente como tantos otros", sostiene.
A JUICIO La pareja agotó la vía de reclamaciones de la Junta, sin resultados. Entonces acudió a los tribunales. Hubo un primer juicio en 2011 a su favor, pero la Junta recurrió alegando que no se le había citado correctamente. Hubo un segundo juicio en 2012, en el que el Juzgado de Primera Instancia número 3 de Mérida volvió a declarar a la pareja idónea para la adopción. "La sentencia es para leerla de arriba abajo", subraya Ruth. La Junta recurrió y hubo una tercera sentencia favorable en 2013. No cabían más recursos. Entonces, el Gobierno regional sí emitió el certificado de idoneidad.
Pero los problemas no acabaron, porque el expediente se compone de dos partes: el certificado y los informes psicosociales, y éstos no se han corregido. "La Junta dice que no puede obligar a los técnicos de Cruz Roja a modificar sus informes, ante ello les pedimos que nos los renueven, porque además solo tienen validez de tres años por ley, y se redactaron en 2010", matizan.
El problema es que, en Rusia, cualquier contradicción implica un rechazo del expediente. "Todo el que conoce las adopciones lo sabe", lamenta la pareja. De hecho, Ruth y David decidieron seguir adelante y prepararon todos los papeles en octubre de 2013, pero su expediente actualmente no prospera en Rusia, no ha sido aceptado a trámite en dos regiones y están pendientes de respuesta en una tercera. La propia ECAI que les lleva el proceso (son organizaciones de intermediación en las adopciones) ya les avisó de que era "prácticamente imposible" conseguirlo con esa contradicción.
TODO EN EL AIRE "La Junta nos dice que tomará medidas cuando un juez ponga problemas en Rusia, pero de este modo ni nos asignarán región ni llegaremos ante los jueces que tramitan las adopciones", indica Ruth. Por si fuera poco, los procesos se han ralentizado mucho en Rusia.
La pareja presentará un incidente en el juzgado para que se cumpla la sentencia, y ha acudido al Defensor del Pueblo. Lamenta la actitud de la Junta, que les llegó a cerrar el expediente en pleno proceso judicial obligando incluso a un contencioso administrativo. "No entendemos nada. Los técnicos llegaron a decir en el juicio que el niño estaría mejor en el orfanato, hasta propusieron que nos fuéramos a vivir entre Cáceres y Madrid", dicen indignados. Otras parejas que iniciaron los trámites al mismo tiempo ya tienen uno e incluso dos hijos. Ruth y David siguen esperando.
(Fuente: www.elperiodicoextremadura.com)

Niño colombiano que se aferró al papa Francisco inspiró película sobre adopción

El diario La Repubblica publica el corto en exclusiva. Cristiana Capotondi se transforma en una joven que, unida a su pareja, enfrenta las tristezas de la infertilidad. Después de agotar otras vías, deciden adoptar. 

Y la vida les regala una pareja de niños, tal como sucedió en la vida real con Carlos, cuyo nombre ahora es Didier Ferruccio, de 6 años, cuando llegó con su hermano a vivir con sus padres adoptivos en Abruzzo. 

El destino les guardaba una gran sorpresa ese 28 de octubre cuando acudieron a la celebración en la Plaza de San Pedro. 

Ese día, su inquieto hijo le mostró al mundo toda la ternura que había en su alma y reveló a un papa paciente y abierto con los niños. 

Tal vez lo mas grato del corto, que dura ocho minutos, es que el pequeño y su hermano participan en la grabación. 

La directora asegura que quería rendir un homenaje al papa y al niño documentando este episodio que conmovió a tantos alrededor del mundo. 

De paso, la historia aspira a convertirse en una motivación para las parejas que atraviesan por la misma situación y que no se atreven a darle una oportunidad al destino a través de la adopción.

(Fuente: www.noticiascaracol.com)

Aprobado el modelo básico de contrato de intermediación para aumentar la seguridad jurídica en adopciones internacionales

El Consejo de Gobierno ha dado luz verde al Decreto que homologa el modelo básico de contrato de intermediación para la adopción internacional, cuya finalidad es otorgar una mayor seguridad jurídica tanto a las Entidades Colaboradoras en Adopción Internacional (ECAI) como a las personas solicitantes de este tipo de adopciones.
De este modo se da cumplimiento al mandato establecido por la Ley de Adopción Internacional, que fija el establecimiento de un contrato que tendrá por objeto exclusivamente las funciones de intermediación que la ECAI asume respecto a la tramitación de la solicitud de adopción, y que deberá ser homologado por la entidad pública competente.
Por este motivo, la Comunidad, a través de la Consejería de Sanidad y Política Social, ha elaborado un Decreto que recoge un modelo único y básico de contrato, en el que, entre otros aspectos, han de quedar especificados los gastos indirectos e indirectos que es previsible que se produzcan a lo largo del proceso de adopción, tanto en España como el país de origen del menor.
(Fuente: www.murcia.com)

viernes, 14 de marzo de 2014

Aumentan un 9% en Navarra las adopciones internacionales en 2013.

"¿Qué hijo deseo adoptar?". Esta pregunta se está quedando anticuada ante el cambio en el perfil de niños adoptables. El interrogante más acertado sería "¿Para qué niño me siento capacitado como futuro progenitor?". Al valorar más las capacidades y los propios límites que los deseos por adoptar a un niño sano y pequeño, muchos procesos de adopción se agilizarían considerablemente. Las estadísticas en Navarra apuntan a una tendencia a la baja en la adopción internacional, desde que en 2004 se viviera el máximo apogeo con 133 casos. Desde ese momento la trayectoria ha sido descendente, y sin embargo en 2013 experimentó un ligero repunte y llegaron a buen término 48 adopciones, un 9% más que en 2012, con 44.

La procedencia de los niños adoptados que llegan a la Comunidad foral sigue siendo en su mayoría del Este del globo terráqueo, aunque las restricciones que están poniendo Rusia y China auguran un cambio de tendencia en las próximas décadas. En 2013 Rusia continuó siendo el país del que procede el mayor número de adoptados (15), seguido muy de cerca por China (13); más lejos se sitúan Perú y Etiopía (5 cada uno), Colombia (4), Vietnam (3) y Benim, India y Ucrania con un menor cada uno. Por sexos, fueron 33 niños y 15 niñas, y por edades del menor el tramo con más adopciones fue el de los 3 a 5 años

"Hay una tendencia de descenso en las adopciones internacionales desde el boom que se experimentó en 2004, aunque sin embargo se ha remontado la cifra más baja, que fue en 2012. Entendemos que es un número ajustado en la capacidad de respuesta de la sociedad navarra. En 2013 hubo trece nuevas familias que se ofrecieron para la adopción internacional y sin embargo 21 que se ofrecieron para la adopción nacional, lo que supone un cambio de tendencia", explica José Luis Martínez Martínez, jefe del Negociado de Adopción del Gobierno de Navarra.

LOS MENORES ADOPTABLES TIENEN UN NUEVO PERFIL

Hace unos años los trámites eran más rápidos y sencillos en la adopción internacional que en la nacional, pero según apunta el secretario de laAsociación de Familias Adoptivas de Navarra (AFADENA), Adolfo García Garaikoetxea, la vía internacional se está agotando por varios motivos. "Los países elevan la dificultad de los requisitos en materia de la salud de los padres, sus estudios... También hay países como Rusia o China que creen que no es digno de mérito reconocer que no pueden proteger a su infancia, en el fondo subyace la vergüenza de dar en adopción internacional. Además, cada vez hay más naciones que ratifican el Convenio de La Haya, que es el que regula la adopción internacional, y por eso disminuyen las adopciones porque es más difícil garantizar la adoptabilidad de los niños. Y también influye que las familias adoptivas españolas baten récords en cuanto a cantidad, muchas tienen certificado de idoneidad para adoptar y por eso el tiempo de espera aumenta tanto", asegura el secretario de AFADENA, una entidad que lucha por visibilizar y normalizar la adopción. 

El perfil de los niños adoptantes ha evolucionado y por ello es necesario que también cambien los ofrecimientos de las familias para adaptarse a estos nuevos requerimientos. Los niños sanos y menores de dos años no abundan, pero muchas solicitudes siguen anhelando este tipo de pequeños y por ello las esperas pueden prolongarse seis o siete años. Sin embargo, los niños con necesidades especiales son el perfil mayoritario: mayores de ocho años, en grupos de tres o más hermanos y con discapacidad o enfermedades crónicas.

"La edad de los niños adoptantes se está incrementando claramente, y la tendencia es que siga aumentando. Por ejemplo, el año pasado en Navarra se adoptaron a dos niños de 9 a 11 años, a cuatro que tenían entre 12 y 14 años y a tres que tenían entre 15 y 17 años. Hay solicitantes que abandonan porque las esperas son muy largas, y desde el Departamento de Políticas Sociales incentivamos la espera activa y ofrecemos talleres de espera. Buscamos ofrecimientos que se adapten a estos cambios de perfil de niños con necesidades especiales. Las familias son conscientes de dónde están y la mayoría asumen la realidad y una espera dinámica", apunta Maite Miguez San Román, Jefa de sección de Adopción y Acogimiento Familiar del Gobierno de Navarra.

TERAPIA POSTADOPTIVA

Tan importante, o más, es el asesoramiento que reciben los solicitantes cuando comienzan su vida en común con el menor adoptado. No hay recetas mágicas para ser un buen progenitor, pero tanto el Gobierno como asociaciones como AFADENA ofrecen talleres con terapeutasque abarcan tanto la espera como la postadopción.

"La historia de la nueva familia no comienza en el aeropuerto, los niños tienen un pasado que hay que tener muy presente y es el que explica las dificultades con las que se enfrentan. Para los adoptados, serlo es una condición que se lleva de por vida, las carencias que han vivido causan unas afecciones que hay que tratar", detalla el secretario de AFADENA.

Desde el Departamento de Políticas Sociales se trabaja estrechamente con el sistema educativo y sanitario para ajustarse lo más posible a las necesidades específicas de los niños adoptados. Desde septiembre de 2010 ochenta familias han pasado por SAFAYA, el Servicio de Acompañamiento de Familias Acogedoras y Adoptantes que da apoyo tanto a las familias adoptantes como intervención terapéutica a las familias en procesos de adopción. 

En este momento trabajan con 25 familias a través de talleres que imparte Nuevo Futuro. "Un 85% de las adopciones van bien, con los problemas normales que puede tener cualquier familia. En el 15%restante puede haber problemas de adopción incompleta: que sea insatisfactoria porque los padres no tenían expectativas muy realistas, o adopciones frustradas, con vínculos familiares que terminan rompiéndose", desarrolla José Luis Martínez.

EN BUSCA DE RESPUESTAS


El reloj no se detiene y los pequeños que llegaron en la década pasada dentro de poco entrarán en la adolescencia, y con esta etapa vital llegan las dudas y las preguntas sobre sus orígenes. Para dar respuesta a estos interrogantes el Departamento de Políticas Sociales ha puesto en marcha un Programa de Búsqueda de Orígenes, que por ahora se desarrolla de manera poco estructurada. "Desde 1996 han llegado a Navarra 1.400 niños y muchos de ellos están realizando una entrada masiva en la adolescencia. Hay que dar respuestas para que estos adolescentes se reconcilien con su historia. En esta búsqueda de su origen necesitan una orientación previa y un acompañamiento porque a veces estas demandas se traducen en una búsqueda desesperada", reflexiona José Luis Martínez.

Para resolver las dudas que surjan sobre el expediente de adopción y los propios orígenes, los menores tienen que tener el consentimiento de sus padres o ser mayores de 18 años. Con el objetivo de reconciliar al menor con esta etapa de su vida, desde este programa se ofrece esta doble vertiente de búsqueda de información y acompañamiento psicológico.

(Fuente: Diariodenavarra.es)

martes, 11 de marzo de 2014

La estadounidense McFadden conoce a su madre biológica rusa en Sochi.

La esquiadora estadounidense Tatyana McFadden aprovechó su participación en los Juegos Paralímpicos de Sochi para poder hacer realidad su sueño y conocer a su madre biológica, Nina Polevikova, tras ser adoptada cuando tenía 6 años.

El emotivo encuentro se produjo después de que McFadden compitiera en la prueba de esquí de fondo de 12 kilómetros, en la que acabó en quinta posición, en un nuevo reto para una de las deportistas más laureadas del atletismo en los últimos años.

"Ha sido maravilloso, es un sueño que siempre he querido cumplir. Siempre he pensado en ello y no podía creer que fuera posible, por lo que ha sido una experiencia gratificante", señaló la esquiadora, mientras que su madre biológica comentó emocionada que era "un milagro" poder haberse encontrado de nuevo con su hija.

Pero el verdadero milagro ha sido el espíritu de supervivencia y de superación de esta deportista nacida hace 24 años en San Petersburgo con espina bífida. Aunque esta malformación, si es operada de forma inmediata, rara vez pone en peligro la vida del paciencia, Tatyana no fue intervenida hasta 21 días después de nacer, y según los médicos, solo su fuerza innata le mantuvo con vida.

Al ser una niña no deseada con discapacidad fue enviada a un orfanato tras ser operada, donde creció en un ambiente de privaciones, ya que no había dinero para casi nada y mucho menos para una silla de ruedas. Durante sus seis años en Rusia aprendió a moverse caminando con los brazos.

Su vida cambió cuando Deborah McFadden, que trabajaba como comisionada de la discapacidad para el Departamento de Salud de Estados Unidos, visitó el orfanato donde vivía Tatyana en un viaje de negocios. El vínculo que se creó entre ambas le llevó a tomar la decisión de adoptarla.

A pesar del nuevo horizonte que se le abrió en Estados Unidos, la niña llegó con una fuerte anemia y con muy poco peso debido a su malnutrición. Los médicos pronosticaron que viviría pocos meses pero una vez más Tatyiana dio muestras de su instinto de supervivencia y volvió a desafiar a un destino adverso.

Su madre adoptiva decidió apuntarla a diversos grupos deportivos juveniles y Tatyiana canalizó toda su fortaleza interna, adquirida durante toda una vida de penalidades, en el deporte. Los resultados fueron tan inmediatos como sorprendentes.

Pese a practicar todos los deportes que se pusieron a su alcance, las carreras de sillas de ruedas se convirtieron en su pasión. Con 15 años se convirtió en la miembro más joven del equipo de atletismo de EE.UU. en los Juegos Paralímpicos de Atenas, su primera competición internacional, donde logró una medalla de plata en los 100 metros y una de bronce en los 200 metros.

Dos años después ganó el oro y el récord mundial en los 100 metros en los Campeonatos del Mundo de IPC 2006 en Assen. Conocida con el sobrenombre de 'la bestia' por su fortaleza, siguió coleccionando medallas en los Juegos Paralímpicos de Pekín y en Londres.

Al margen de su actividad deportiva, estudia una licenciatura en Estudios de la Familia y Desarrollo Humano de la Universidad de Illinois, y a trabajar como defensora nacional para la igualdad de acceso de las personas con discapacidad.

El pasado año se convirtió en la primera atleta del mundo en conseguir ganar cuatro maratones -Boston, Chicago, Londres y Nueva York- además de seis medallas de oro, en el campeonato del mundo celebrado en Lyon, en todas las disciplinas atléticas desde los 100 a los 5.000 metros.

Precisamente, tras ganar estos maratones decidió destinar todo el dinero ganado en preparar el reencuentro con su familia biológica, tal y como explicó en Sochi su madre adoptiva.

"Después de todos los maratones que había ganado tenía algo de dinero y me dijo: ya sé lo que quiero hacer con el dinero. Necesitaba un coche nuevo y pensé que se iba a gastar el dinero para comprarse uno, pero ella dijo que quería traer a toda su familia rusa a Sochi", relató.

La deportista ha pagado el vuelo y el alojamiento para diez personas en Sochi durante todos los Juegos. "Para mí era muy importante tenerlos aquí y he trabajado muy duro para conseguirlo", señaló Tatyana, quien volverá a competir el miércoles en la prueba de 1 kilómetro, donde contará con el apoyo de su familia biológica y del director del orfanato de Rusia del que fue adoptada. EFE

(Fuente: Russia beyond the Headlines)