Adoptar, según la Real Academia Española es recibir como hijo, con los requisitos y solemnidades que establecen las leyes, al que no lo es naturalmente. De hecho, las personas que adoptan tienen todas las obligaciones derivadas de la patria potestad, desapareciendo, excepto en casos excepcionales, los vínculos entre el menor adoptado y sus padres biológicos.
En la actualidad, el plazo para conseguir una adopción oscila entre los tres y cinco años, un tiempo que no ha cambiado mucho en la última década, al igual que el proceso de selección para poder ser aptos para adoptar.
En 2013
En Almería, el año pasado, un total de 22 niños fueron adoptados por diferentes familias, dos menos que en el año anterior, 2012. De ellos, doce corresponden a adopciones nacionales, de las cuales nueve son de otra provincia y tres, de Almería.
Respecto a los otros diez menores, referidos a adopciones internacionales, están muy repartidos en hasta siete países de todo el mundo. Dos de China, Rusia y Etiopía; y uno en Filipinas, Nicaragua, Polonia y Vietnam. Cabe destacar que las solicitudes presentadas han sido muy superiores. 29 en el caso de las adopciones nacionales y 19 por parte de las internacionales.
El proceso para adoptar no es sencillo, ya que se trata de un asunto muy delicado. El Servicio de Protección de Menores de la Delegación Territorial de Igualdad, Salud y Políticas Sociales es el encargado de tramitar las solicitudes y los expedientes de adopción, así como de realizar los informes psicosociales necesarios para tramitar el proceso de adopción, tanto en el caso de las nacionales como de las internacionales.
Procedimiento
Así, el procedimiento no ha variado mucho. El primer paso de la familia adoptiva es plantear la cuestión en el Servicio de Protección de Menores, a partir de ahí comienza el proceso. En primer lugar se realiza un curso de preparación y formación en la adopción, de obligado cumplimiento, que sirve de reflexión y maduración de la solicitud por parte de los solicitantes. En el curso, con una duración de cuatro semanas con cuatro sesiones de tres o cuatro horas, se intenta dar a conocer el significado de la adopción y las características de la misma.
Una vez realizado el curso se realizan diferentes entrevistas e informes psicológicos por parte de trabajadores sociales, además de una visita al domicilio familiar para realizar una valoración que, junto con el Servicio de Protección de Menores, expiden o no la declaración de idoneidad con la que se les permite adoptar a los solicitantes.
Con esta declaración los demandantes pasan automáticamente a un registro central a nivel autonómico, de toda Andalucía. El paso siguiente es una larga espera hasta conseguir una adopción. Pero no todo queda ahí, una vez en posesión del menor, los primeros seis meses la familia adoptiva lo tiene en acogimiento preadoptivo, hasta que un juez dicta un auto de adopción.
Motivaciones
Según María García Cara, la jefa del Servicio de Protección de Menores, “en los últimos años se está observando un aumento de las adopciones nacionales en detrimento de las internacionales”. Respecto al perfil de las familias adoptivas García Cara explica a LA VOZ que “hay de todo, familias biparentales, heterosexuales y homosexuales”, pero si aclara que “impera la familia tradicional”.
Por otro lado, las motivaciones principales para adoptar a un hijo “responden mayoritariamente a problemas de fertilidad y se desea tener hijos, en otros casos minoritarios resulta como una opción dentro de un proyecto de familia para completarla o simplemente para ayudar a niños desamparados”, explica a LA VOZ, Juan Sebastián Fernández, profesor de la Universidad de Almería.
También asegura Fernández que en España “ha descendido casi a la mitad el número de adopciones, especialmente nacionales en los últimos cinco años y que en Almería, al contrario, abundan más las internacionales”.
(Fuente: www.lavozdealmeria.es)
No hay comentarios:
Publicar un comentario