viernes, 18 de julio de 2014

Las adopciones caen en picado por la crisis y las trabas que ponen los países de origen.

Hasta finales del mes de junio, solo han llegado a Aragón nueve niños procedentes de otros países dentro de procesos de adopción internacional. Los pequeños han nacido en China (4 niños), la Federación Rusa (1), Filipinas (1) y La India (3). La suma de todos representa el peor dato registrado en la comunidad autónoma en las últimas décadas. 

Para explicar esta caída hay que tener en cuenta varias circunstancias. Por una parte, el escenario internacional está cambiando: algunos de los países con los que tradicionalmente ha habido acuerdos bilaterales han empezado a despertar económicamente y a endurecer sus condiciones. Otros, como Ucrania, Nepal y Etiopía, han estado en el punto de mira por irregularidades (más vinculadas a la falta de información que a la venta ilegal de niños, por ejemplo) y las adopciones se han suspendido cautelarmente. 

La puntilla la pone el hecho de que, además, en el escenario actual, no todas las familias se pueden permitir invertir una media de 20.000 euros en un proceso costoso económicamente y moralmente, que suele requerir dosis de paciencia, juicios y viajes. «Aquí no hay plazos. No sabemos si un proceso se resolverá en 6 meses o en 10 años. Las familias que emprenden este camino deben ser conscientes de que no hay seguridades al 100%» explica Javier Ferrer, jefe de Prevención y Protección del Menor del Gobierno aragonés. Aunque desde España el proceso se agilice al máximo, la luz verde la da el país de origen. 

Las cifras de los últimos años han ido en caída libre. Hasta junio llegaron nueve pequeños de un amplio abanico de edades: cuatro de ellos tenían 3 años o menos; y cinco, entre 5 y 8 años. El más pequeño, de meses, nació en China. El más mayor, de 8, en La India.
 Las series temporales dan fe del mal momento de estos procesos. El año anterior (2013) habían sido 38 niños; el 2012 fue un periodo ‘negro’ (llegaron 21); y las cifras anteriores habían sido muy superiores: 93 pequeños en el 2011; 102 en el 2010; 84 en el 2009; 110 en el 2008 y 142 en el 2007. En esos primeros años, muchos hacían ese largo viaje desde Rusia, China y La India. 

También era generoso el grupo de Hispanoamérica, pero luego todo empezó a cambiar sin tener en cuenta el continente de origen. En los últimos tres años, hay países que no han asignado niños a Aragón: ni Bolivia, ni Chile, ni Costa Rica, ni México, ni Nepal, ni Perú ni Ucrania, entre otros. 

Tampoco las solicitudes son lo que eran. La cifra más alta se registró en Aragón en 2005, con la apertura de 367 expedientes. Este año, van solo 31. Uno de los principales escollos se ha sufrido en Rusia. El convenio bilateral entre España y la Federación ha estado bloqueado durante un año y, con él, las asignaciones y juicios pendientes. 

El PSOE exigió que la situación se solucionase, ya que diez familias aragonesas estaban afectadas. Todo parece resuelto por fin, pero con la condición de que las familias que reciban a los pequeños sean heterosexuales y que no se trate de un proceso iniciado por una persona soltera que, a priori, forme una familia monoparental. 

Otras incógnitas se abren en un mundo cambiante: ¿Qué pasará si la Federación y Ucrania entran en un enfrentamiento abierto? Los expertos coinciden en que un conflicto bélico o un cambio de tendencia en el gobierno pueden influir. «Nunca sabemos qué puede suceder. A veces han pasado 10 años hasta que se ha completado una adopción... no es una ciencia exacta», insiste Ferrer. Algunos ejemplos se ven con las adopciones chinas. La alerta sanitaria por la gripe A ha obligado a cerrar temporalmente sus fronteras en al menos dos ocasiones.
(Fuente: www.heraldo.es)

No hay comentarios:

Publicar un comentario